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lunes, 27 de septiembre de 2010

La vergüenza y la impunidad por ARTURO RENDON PINEDA

¿Qué es tener vergüenza? «tener sentimiento de la propia dignidad,…es tener pundonor».

Es lo que falta en la política de quienes ostentan los poderes públicos: en Ministros, Magistrados, diputados, ejecutivos, y tantos otros corruptos de cuello blanco que con el mayor descaro y sin avergonzarse un ápice, niegan sus crímenes y mienten sin escrúpulos en las entrevistas con medios de comunicación. Son personas que a fuerza de hacer lo ilícito y de saberse impunes perdieron el sentido de la propia dignidad. Robar el erario público, asaltar recursos destinados a la merienda escolar, falsificar documentos y comprar sin licitación medicamentos vencidos, no les ruboriza ni les hace enrojecer.

Crimen, es la estupidez de quien deja rastro o se deja agarrar con las manos en la masa. No les importa, de antemano saben que saldrán impunes, basta comprar abogados y jueces para recibir sobreseimiento definitivo y salir abanicándose con las cartas de libertad como retando a la sociedad honrada que da por sabido que la justicia ha sido montada para facilitar estos recursos para favorecer a quienes los nombraron.

Al exhibir sin verguenza la impunidad de que hacen gala los que asesinaron la Constitución, tiempo después de ser encontrados in-fraganti, no solo gozan de libertad; antes bien, disfrutan de privilegios y continúan ostentando altas posiciones ante una sociedad “perpleja” que al fin se canso de ser manipulada por unos pocos millonarios que se pasean por el mundo como si nada hubieran hecho: ¿Dónde están las sanciones? Esta falta de vergüenza y cínica desfachatez nos lleva a pensar que el mundo, no es más que injusticia y miseria. Resulta inútil que todo hondureño que se precie de honesto no pueda llenarse de ira y sentirse indignado ante tanta impunidad.

Imposible ignorar que el golpe de Estado que ha preocupado a las naciones pretenda ser ocultado por la manifiesta venalidad de los encargados de hacer justicia, que como ocurre casi siempre, son fuertes cuanto se trata de los débiles mientras son cobardes ante los poderosos. Afortunadamente el 28 de Junio, el pueblo despertó y no va a perdonar jamás la falta de decoro de cualquier gobierno de turno que para justificar la impunidad de sus actos, construya falsos argumentos como monumentos a la impunidad, entre tanto, los medios de desinformación hacen su pingue negocio que esta vez no han podido disfrazar para evitar ser descubiertos, al ser desenmascarados por la prensa alternativa y el periodismo ético que ya ha informado al mundo de su inconfesable farsa...

Santa Rosa, Copán, 23 de Septiembre 2010

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