Mel y la coyuntura " Oscar Amaya Armijo "

Mel es un líder que la historia reciente parió, es un producto de la coyuntura. Nadie lo fabricó como a los lideres del marketing político.

Muchos aún no salen del asombro, les cuesta aceptar ver a Mel convertido en un conductor de masas, papel que él no pidió sino que la historia se lo impuso.

Los lideres no se inventan se hacen allí en el fragor de la contienda política y social, Mel es producto de esta lucha y nadie puede negarlo.

Es un hombre que bien pudo quedarse en el exilio dorado, pero allí se le vio sorteando los peligros y obstáculos impuestos por la policía del imperio, y se sometió al calvario de la represión al refugiarse en la embajada del Brasil.

Este acto, sumado a otros de gran envergadura, templaron el carácter del Mel y lo colocó , a los ojos del pueblo hondureño, como su conductor, al margen de su filiación liberal. Este hecho, por supuesto, no lo entiende ni la propia oligarquía, que un hombre salido de su seno, se una al pueblo y reivindique sus más caras aspiraciones.

Este es el típico caso en donde la ubicación de clase no coincide con la posición de clase. En tal sentido, Mel arrastró a la resistencia a sectores y segmentos de clase que en un pasado reciente era muy difícil conciliarlos con sectores y segmentos de las clases sociales dominadas. Incluso el reacomodo de estos grupos aun presenta dificultades en el el seno del FNRP.

Por supuesto, estamos claros que Mel no es determinante en las luchas por la transformación de Honduras (el pueblo es lo determinante), pero nadie puede negar la enorme influencia que este hombre ejerce en el decurso de los últimos acontecimientos históricos sociales y políticos actuales.

No reconocer esta realidad significa que se observan los acontecimientos políticos a espaldas de la historia o con anteojeras colindantes con el sectarismo y dogmatismo ideológico.

Los ataques que recibe Mel tanto de la oligarquía como de sectores muy cercanos al FNRP, no deben sorprender a nadie, puesto que obedecen al temor que abrigan de perder o ver menguados sus intereses económicos, políticos y sociales de clase.

Mel, por tanto, es el líder que en esta coyuntura histórica necesita el país para establecer una política de alianzas de clases y un plan de unidad de acción, que conduzcan al triunfo de la resistencia para revolucionar Honduras.