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viernes, 18 de marzo de 2011

Bebé a punto de morir intoxicada por la intransigencia de Agentes del Estado que impiden labor de Procuradora de Derechos Humano


Durante la movilización realizada este día en Tegucigalpa, en donde los manifestantes fueron reprimidos con golpes y gases lacrimógenos, los antimotines se negaron a que se le diera asistencia médica a una bebé de pocos meses de nacidas, que fue afectada por los gases que la policía y el ejército lanzaron contra los protestantes.

Ante la brutal represión que hacía la policía, los manifestantes corrieron en todas direcciones buscando refugio, la policía iba tras de ellos lanzándoles indiscriminadamente bombas lacrimógenas.

Un grupo de maestros se refugió en el INPREMA, entre ellos una maestra que cargaba su bebé de pocos meses, quien intentó salvaguardarla en la tercera planta de uno de los edificios que está en construcción esa institución.

La policía y ejército intentaba ingresar violentamente al edificio, por lo que Hedme Castro, que observaba la situación, de inmediato se identificó como Procuradora de Derechos Humanos del Cofadeh, ante el Comisionado de Policía Mario René Chamorro, que dirigía el operativo, y en presencia del Comisionado Ruiz, a quienes les solicitó le permitieran entrar al edificio por 10 minutos para evacuar a las personas que estaban allí, en especial a la maestra con su bebé.

El Comisionado Mario René Chamorro le negó el ingreso a la procuradora de los Derechos Humanos, Hedme Castro, para que auxiliara a la bebé

El Comisionado de Policía Mario René Chamorro autorizó que entrara a sacar a los refugiados, pero cuando Hedme iba a ingresar al edificio, comenzaron a lanzar bombas lacrimógenas, por lo que se regresó y les dijo “soy procuradora de derechos humanos, ustedes me permitieron 10 minutos para evacuar a la maestra con su bebé”; “quien p… sos vos”, le respondieron agentes policiales, “les repito que soy procuradora de derechos humanos, soy del Cofadeh”, en eso la golpean con toletes y arrinconan en la pared del Banco Atlántida, por lo que les grita que tiene medidas cautelares, le dicen “me vale v….” y la siguen golpeando.

El maestro y procurador de derechos humanos, Adalid Vega, fue advertido de lo que sucedía con Hedme, por lo que se presentó en su auxilio, pero nuevamente la policía arremete contra otro procurador, que lo recibe con golpes de tolete.

Los policías que golpeaban a los procuradores, al percatarse que unos periodistas los estaban filmando, se alejaron de ellos.

En medio de las bombas lacrimógenas, la bebé fue sacada para ser llevada a un centro medico.

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