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miércoles, 3 de noviembre de 2010

Tecnología moderna y seguridad por : Eduardo David Ardón

Ayer, hoy y siempre manejamos el criterio y la tesis de una política integral de seguridad, la cual es desechada, desapercibida, no aceptada por los gobiernos y autoridades del Ministerio Publico y la policía.
De esa manera, el crimen, la violencia, delincuencia y crimen organizado se han convertido en un sistema difícil de enfrentar y vencer.


No se puede derrotar el crimen organizado con medidas unilaterales que no tocan la raíz purulenta del problema. Las medidas unilaterales pueden ser efectivas en el momento por la impresión e impacto, pero con el tiempo dejan de producir el resultado deseado.
También es cierto, que no se pueden aplicar de un solo todas las medidas, pero, si se aplican los correctivos desde las causas principales, el fenómeno delincuencial será derrotado.
Una de las cuestiones básicas a resolver, es la depuración de la policía y organismos judiciales donde anidan relaciones directas con las organizaciones delictivas que viven en el tuétano del organismo social hondureño.
En tal sentido, Gautama Fonseca, tenía razón cuando decidió como Ministro de Seguridad, sacar a más de dos mil policías por considerarlos corruptos y vinculados con todo tipo de organizaciones delictivas. Esta medida no gusto al poder factico e hicieron todo lo posible por despedirlo, hasta que lo lograron y pusieron a Oscar Álvarez para que mantuviera la tolerancia con los policías deshonestos y corruptos.

Paralelamente a la depuración policial, el gobierno está obligado a implementar la inversión de capital en el proceso productivo de bienes materiales, encaminada a crear fuentes de trabajo para los dos millones de desempleados y, así, paliar la situación de indigencia, que es caldo de cultivo de todo tipo de delincuencia por la necesidad de subsistir.
La normalización de la crisis, propiciada por el golpe del 28 de Junio, también serviría para atenuar la violencia y el quehacer de la asociación ilícita del crimen y la delincuencia.
No podemos continuar con la desunión del pueblo en golpistas y anti golpistas porque no se podrá establecer la reconciliación que pretende Pepe Lobo manteniendo a golpistas de alto rango en el engranaje administrativo.
Esto significa, que primero hay que atacar las causas principales que generan la violencia y los diferentes hechos delictivos.
Volviendo al tema de la tecnología moderna y la seguridad, tomemos en cuenta que existen medidas de menor y mayor grado.
Los problemas nodulares ya se expresaron, las otras acciones son consecuencia y aunque revisten importancia no solucionan la situación de una vez y para siempre, sino que se convierten en parchos momentáneos que no detienen el delito, al delincuente con su narcotráfico y crimen organizado.
Concretamente me refiero a la instauración del “Centro Digitalizado de Observatorio Policial” por iniciativa de la Municipalidad Sampedrana, empresarios poderosos y la policía nacional quienes aportaran la suma de 200 millones de lempiras para costear tal observatorio digital.

Con esta tecnología de cámaras y televisión, buscan disminuir los índices de criminalidad, conectando los sistemas de circuito cerrado con los que utiliza la policía, para así, poder observar desde las pantallas, los movimientos de vehículos sospechosos que usan los delincuentes y apresarlos rápidamente por sorpresa.
Es importante la utilización de la tecnología en la tarea de combatir el crimen y las acciones delictivas, pero, creemos que debe formar parte del Plan Integral que empieza por terminar con las causas que generan la delincuencia.
El jefe de la Policía Metropolitana de San Pedro Sula, Subcomisionado HéctorIvánMejía, reconoció que existen muchas dudas acerca de la efectividad del proyecto e invito a conocer detalladamente el funcionamiento del proyecto digital.

Las dudas son naturales y lógicas y tienen su origen, en la existencia de policías corruptos por lo que primero hay que depurar a esta institución. Por otra parte, es discutible la aseveración de que las personas que trabajaron en el manejo de este proyecto, han sido sometidas a supervisión y análisis de personalidad, lo que nadie cree porque en el país no existe credibilidad hacia nadie y tampoco existen los que se consideran garantía para establecer quién es o no honrado para desempeñar esa tarea.
El mismo Oscar Álvarez ha reconocido en muchas ocasiones, que la policía ha sido infiltrada por el crimen organizado, razón por demás poderosa, para no creer en que se aplicara eficazmente la ley a los que la violan.
En la euforia momentánea, las autoridades policiales caen en el error de afirmar, que por la puesta en funcionamiento de las cámaras ya disminuyo el robo de vehículos. Esto es infantil, pues lo que ocurre es que por tiempos el delincuente se esconde y espera el momento propicio para atacar.

Por otro lado, una cuestión es que disminuyan los delitos y, otra distinta que terminemos con el criminal o delincuente. Puede bajar la intensidad de las acciones, pero, el actor, continua “vivito y coleando” preparándose para seguir cometiendo ilícitos.
Por principio, no nos oponemos al observatorio policial, porque es moderno y científico, pero por si solo y con las personas que lo mantienen y apoyan, no se vencerá al crimen organizado, lo más que pueden hacer es evitar algunos delitos.
No se puede pasar desapercibido el hecho, de que más de alguna de las personas encargadas de la vigilancia de San Pedro Sula, podría ser comprada y tentada por los “capos”, y ponerles en bandeja de plata, la tecnología para cometer secuestros y extorsiones.
Imaginémonos que la capital haga lo mismo, se gastarían otros 200 millones, que haciendo lo más importante primero, se ahorrarían y esos fondos se canalizarían en pagar prestaciones, salarios atrasados y los compromisos de estas municipalidades en quiebra.
El alcalde Juan Carlos Zuniga, está enfrentando más de quince demandas y embargos de miles de millones de lempiras que deben pagarse al instante, pero su atención se desvía a la seguridad, tema del cual debe ocuparse el gobierno y los Estados Unidos, porque el crimen organizado y el narcotráfico tiene como mercado principal a Norteamérica. Por eso están obligados a dar más apoyo a esta lucha a través del Plan Mérida que se mantiene estancado. La responsabilidad no solo es nuestra sino que de todo el istmoy la gran nación del norte. Pero, empecemos por el principio, para vencer en esta guerra vinculando la tecnología con la seguridad.



e-mail: eduardodavidardon@hotmail.com

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