En la Honduras de hoy, ya nunca mas nada volverá a ser lo mismo, en sus cuatropuntos cardinales se levantan ejércitos de pobladores exigiendo cambios profundos enel sistema, se cansaron de ser siempre los payasos del circo, ahora exigen participaren toda la función, se dieron cuenta que la tan cacareada democracia no era masque un ardil para enriquecer a uno pocos a través del sufrimiento de las mayoríasdesfavorecidas.
¡Constituyente! ¡Constituyente! gritan hombres, mujeres, niños, ancianos, en suseternos recorridos por esas mismas calles en donde alguna vez habían celebrado lascampañas políticas de los partidos tradicionales de sus amores, si, ahí mismo en dondeelevaban a los altares a Roberto Suazo Córdova, a Rafael Leonardo Callejas a RicardoMaduro y muchos otros mas que solo trajeron corrupción, muerte y miseria para elpaís.
Han pasado ya varios meses desde el día que aquel líder olanchano y presidente delos hondureños se lanzara a la aventura de atreverse a pedir participación directa delpueblo hondureño en los grandes temas de interés nacional, ¿Cuál es el problema enconsultarle al pueblo decía el presidente Zelaya? Una interrogante que costó su valoren oro, la santa inquisición de la oligarquía hondureña apoyado por el sector religiosomas reaccionario, no le podían perdonar tal acto de herejía, pero como era posiblevociferaban, que este hombre salido de las fauces de la oligarquía misma se atrevieraa quererle dar poder a esa enorme masa de descamisados, como los denominara algunavez la primera dama argentina Evita Perón.
Ahora después de ser testigo de aquel acto de salvajismo en contra del presidenteZelaya el 28 de junio del 2009, de las torturas, de los golpes, de las muertes, de losprocesos injustos en contra de nuestros hermanos y hermanas en resistencia, nosencontramos ahora en que los mismos que satanizaban la cuarta urna, la consulta alpueblo hondureño, aquellos que decían que era un delito consultar y mencionar siquierala palabra constituyente, ahora se llenan la boca pidiendo consultas en un monologocon el espurio Porfirio Lobo Sosa.- Vaya cuanto han cambiado desde aquellos días desufrimiento y dolor, los dos partidos tradicionales ( Nacional y Liberal) ahora se unenpara pedir una constituyente de la misma forma que se unieron para dar un golpe deestado.
Seguramente que estos sectores al presenciar las enormes demostraciones de fuerzade un pueblo en las calles, pidiendo la constituyente y el regreso de su máximo líderManuel Zelaya Rosales, de que el FNRP recolectara la histórica cifra de mas deuní millón de declaraciones soberanas pidiendo precisamente eso, la constituyente.,dirigidos por el de siempre Carlos Flores Facuse y avalados como nunca por losEstados Unidos, han replanteado su estrategia de lucha y ahora pretenden arrebatarle alfrente la bandera sobre este tema, y desde sus trincheras convocar a una constituyenteque seguramente va producir una replica de la constitución de 1982, haciendo parecerque cambia todo pero para que no cambie absolutamente nada.
Sumado a este falso interés por un cambio , los golpistas han echado a andar su
maquinaría propagandística de sometimiento a un pueblo que ha despertado peroque corre el riesgo de volverse a dormir si no estamos atento a contrarrestar talescampañas, los infiltrados en las organizaciones están a la orden del día, cumpliendoa cabalidad su cometido de provocar divisiones en todas aquellas organizaciones quehoy se aglutinan en el frente, no es extraño en estos momentos ver confrontacionespublicas de personas que hace poco caminaban y sudaban juntos en la búsqueda dela consumación de un ideal.- La guerra de oprimidos y opresores esta cambiando,ahora solo falta saber quien se mantendrá firme en su convicción de ganar la partida,el bipartidismo golpista para seguir jorobándole la vida al pueblo o el pueblo organizadoy unido para obtener su tan ansiada libertad a través de una Asamblea NacionalConstituyente que no tenga OLOR A BI PARTI DI SM O.
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