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viernes, 18 de marzo de 2011

El uso desmedido de la fuerza deja en estado delicado a maestra

Por segunda día consecutivo, policías antimotines atacaron a profesores, sindicalistas, taxistas y otros integrantes del Frente Nacional de Resistencia Popular que se manifestaban de manera pacífica contra las medidas económicas aplicadas por el régimen de facto de Porfirio Lobo.




La protesta que se realizaba a en las boulevard Centroamérica en las inmediaciones del Instituto de Previsión del Magisterial, INPREMA, y contaba con la presencia de varios miles de personas fue desalojada con el uso de una lluvia de bombas lacrimógenas, cientos de efectivos policiales y militares y tanquetas de agua.


El uso desmedido de la fuerza usado por parte de los cuerpos de represión ha causado la indignación de la población y la denuncia de organismos de derechos humanos que han emitido comunicados para repudiar la actuación del Estado.

El profesor Ángel Hernández dijo que “es terrible cómo nos atacaron como si fuera una guerra entre militares armados.” “El pueblo ya no aguanta más”.

Las protestas de varios sectores sociales se llevan a cabo en todo el país y han hecho coincidir a una gran gama de organizaciones que incluyen transportistas, campesinos, obreros, empleados públicos, maestros, y enfermeras; todos integrantes del Frente Nacional de Resistencia Popular.

Condena nacional e internacional

La Plataforma de derechos humanos integrada por seis organizaciones, emitió un pronunciamiento donde señala “Se han recibido denuncias de la brutalidad policial ejercida contra las y los manifestantes desde distintas comunidades del país entre ellas, de Danli; de Comayagua, donde se reportan más de 29 personas detenidas y golpeadas; de Tegucigalpa donde además de lanzar una gran cantidad de bombas lacrimógenas se persiguió a los y las manifestantes pese a que la manifestación ya estaba disuelta. Esta brutal persecución ha dado como resultado más de 8 personas capturadas, tres son mujeres; varias personas desmayadas por los efectos de los gases lacrimógenos, entre ellas una señora embarazada que además sufrió una crisis respiratoria; un manifestante desaparecido hasta el momento junto con una niña de 10 años.”

La Comisión de Verdad, organismos que investiga los crímenes de lesa humanidad cometidos después del golpe de Estado de 2009, denunció que varios de sus miembros fueron agredidos por los cuerpos de seguridad y las oficinas donde reciben denuncias de las víctimas de represión fueron rodeadas por antimotines que arrojaron bombas lacrimógenas al edificio.

La profesora Ilse Velásquez en peligro de morir

La maestra Ilse Velásquez, subdirectora de la escuela Argentina, sufrió un paro respiratorio y tuvo que ser asistida por otros profesores que la llevaron al Hospital Escuela, donde se encuentra en la Sala de Cuidados intensivos. También sufre de múltiples golpes infringidos por los policías.

La gran cantidad de gases usados contra la manifestación puso en peligro la vida de los manifestantes y los vecinos del lugar. El día anterior hubo denuncias de escuelas, colegios privados y personas de la colonia Las Colinas cuyos domicilios se llenaron de gases.

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