El regreso alternativo de Mel por Roberto Quesada

“Podrán golpearme, romperme los huesos, matarme, tendrán mi cadáver, pero no mi obediencia”.-- Mahatma Gandhi.Obreros, campesinos, maestros, católicos, doctores, amas de casa, estudiantes, taxistas, sindicalistas, ex militares, jóvenes, jovenazos, tercera edad, políticos, gays, protestantes, reservistas, artistas, abogados, escritores, garífunas, periodistas, desempleados, feministas, indígenas, empresarios, en fin, un país entero marcha, unos en las calles, otros desde sus puestos de trabajo (obligados por las amenazas), pero todos, cada uno desde su trinchera, se unen a una causa común: el regreso a Honduras de la constitucionalidad y la salida de los golpistas que han asaltado el Estado, violado la Constitución.En este golpe de Estado se ve de todo, por ejemplo, hemos descubierto, con especialistas en computación, que en una institución “garante” de las “elecciones” existe un laboratorio que se encarga de difamar personas, enviar anónimos por correos electrónicos, insultar, desmoralizar a quienes defendemos la constitucionalidad, y todo con ese proceder, ya conocido por todos, de los golpistas, en las sombras, como lo que son: cobardes. Lastimosamente este hecho involucra a parientes míos golpistas (al finalizar la investigación diremos sus nombres, si usted ha recibido anónimos de una tal Honduras Independiente, por favor reenvíemelos).Otra nota insólita del golpe de Estado es que ahora los victimarios quieren convertirse en víctimas. Toda persona bien informada sabe que la policía hondureña violó a una mujer en Choloma y que las Fuerzas Armadas ha golpeado mujeres (testimonios y fotos existen a granel, allí los tiene el CIDH), por ello no es de extrañar que aparezca Romeo Vásquez Velásquez, denunciando a una mujer, a la actriz Xenia Sagrario Flores que encarnaba a “Carmen”, en el anuncio de la Cuarta Urna, ante el Ministerio Público. ¡Pobrecito, esa mujer ha “torturado” al general!El único que dice que son “héroes nacionales” y los compara nada menos que con Francisco Morazán Quesada (¡qué horror!), es Micheletti. Además, ha denunciado al periodista David Romero, aun cuando Cholusat sur, la televisora del pueblo hondureño, tiene imágenes de las Fuerzas Armadas militarizando esta estación. Y así hay cantidad de evidencia a la violación de la Libertad de expresión, como a Radio Progreso y a Radio Globo. No menos perseguidos o amenazados han estado Radio Uno y El Libertador, así mismo Canal 11 y Diario Tiempo. Seguramente el general lo hace como ejercicio, para ir practicando a ver cómo se va defender cuando tenga que rendirle cuentas a la Corte Penal Internacional. E internamente tiene la cuenta pendiente con los otros oficiales (decentes, si los hubiese) de cómo ha llevado, en dos meses, a las Fuerzas Armadas a tal desprestigio, a que estén por el piso y el pueblo clamando por abolirlas.Y eso no es todo, el desorden es tal, que un vicepresidente del Congreso Nacional (de facto), Ramón Velásquez Nassar, en la reunión de emergencia que hizo dicho Congreso, a raíz de la declaración de los Estados Unidos de que lo acontecido en Honduras fue un rotundo golpe de Estado y la suspensión de toda ayuda económica, excepto la humanitaria, confesó el congresista: “Yo he estado en todos los golpes de Estado de Honduras, lo que hemos tenido en Honduras es un golpe de Gobierno” (Cholusat sur, 3 sept.). Los compatriotas que tenían duda, con esto les debe bastar para unirse a la insurrección, el Congreso mismo ha aceptado que fue un golpe (lo que significa violencia y participación de las Fuerzas Armadas). Así que todas y todos a hacer efectivo el Artículo 3 de nuestra Constitución y a desobedecer por completo y expulsar a estos violadores de la Carta Magna.Así los golpistas, desde la tal carta de renuncia que el presidente Zelaya nunca escribió, han venido en contradicciones, mintiendo descaradamente, falsificando documentos, acusando sin pruebas, alterándolo todo, pero de lo peor nos enteraremos más adelante, cuando veamos el saqueo que han hecho y están haciendo ellos, los golpistas, a nuestro país. Por allí en Internet andan unos leguyelos y leguyelitos, que cuando ven a auténticos togados como el juez Garzón les tiemblan los traseritos (o cualquier otra palabra que rime), con papelería falsa, como todo lo de los golpistas, según ellos descalificando al presidente Zelaya por corrupción. Pobres leguyelos, eso no se los cree ni su propia familia, ya bastantes mentiras han dado como la carta apócrifa—antes mencionada-- del presidente o como que el AID les daría toneladas de millones para seguir en el festín.La clase media tiende a desaparecer de continuar los golpistas usurpando el poder, la crisis que se avecina es enorme, y ya se hace sentir en muchos lugares y hogares, según me cuentan amistades y lectores. En el mundo nadie les cree, y en Honduras las camisetas blancas ya no las quieren ni a dos por lempira.Por otro lado se habla de elecciones, que tienden a ser más desconocidas que un aborto, puesto que nadie las reconoce ni reconocerá de continuar el desorden sin ley que impera hoy en Honduras. En este sentido, algunos que piensan que el pueblo hondureño aún está sumergido en la ignorancia, y creen que el presidente Zelaya pueda llegar poquito antes, solamente para legitimar tales “elecciones”, con lo que no cuentan es que Honduras ha despertado, y constitucionalmente se eligió al presidente Zelaya para que gobernara cuatro años, no tres años y diez meses, no tres años y nueve meses, no, estamos totalmente decididos a que el presidente cumpla con la Constitución y ello significa que cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo, que los golpistas le restan al mandatario, tiene que ser repuesto. Por tanto ni se ilusionen con que la estrategia dilatoria funcionará.Pero eso no es todo, como si esas debiluchas Fuerzas Armadas (claro, digo debiluchas si se enfrentaran a un verdadero ejército y no a civiles desarmados), fueran las de la Alemania de Hitler, en reporte de Noé Leiva, se lee: “Tras una reunión de Micheletti con los altos mandos militares y policiales, el ministro de Defensa (de facto), Adolfo Sevilla, advirtió que la suspensión de la ayuda en el caso de la lucha contra el narcotráfico afecta más a Estados Unidos”."Si no tenemos el apoyo del país más consumidor del mundo, les llegará más droga a ellos. No tenemos fondos, entonces, definitivamente, será más difícil para ellos", sentenció. Como bien lo define el colega Billy Peña, refiriéndose a las actuaciones del gobierno de Facto: “De pronto nos hemos convertido en un Estado paria, rechazados por el mundo pero siempre arrogantes y prepotentes”.Es de suponer la carcajada en Washington, y no es por otra cosa si no por lo burdo y absurdo de la amenaza y el chantaje, además de la autoimplicación. Con ese tipo de defensas Micheletti se ‘norieguiza’ cada día más.De este golpe de Estado-Militar habrá muchas cosas más, entre ellas dos Record Guinnes. Uno: Para esa Resistencia incansable que lleva liderazgo de un pueblo lanzado a la calle; y el otro al Ministerio de Relaciones Exteriores (de facto), primer Ministerio de Relaciones Exteriores que es sin tener siquiera una Relación Exterior.Los golpistas deberían de entender de una vez por todas que su golpe de Estado ha sido un total fracaso, la tenue esperanza que tenían de que Washington fuera el único que les creyera la historieta de la “sucesión” se ha desvanecido. Es tiempo que acepten su “torpeza” (como lo califica Mario Vargas Llosa), y derrota y dejen de profundizar la crisis en Honduras. Nadie les cree. Mejor cedan espacio, den el paso para reiniciar la reconciliación y orden del país con la restitución del presidente constitucional Manuel Zelaya Rosales. La normalidad debe de regresar a Honduras, por ejemplo, el licenciado Edwin Araque tiene que volver a la presidencia del Banco Central de Honduras (y los que han vivido entre perros, y que hoy usurpan un lugar en dicha institución, pues deben de volver a su origen, a cuidar perros).Todo tiene su tiempo, y la paciencia su límite. El pueblo hondureño, y deduzco por sus últimas declaraciones, que la del presidente Zelaya también, se está agotando. Y también sé por la gente que llama a las emisoras (Radio Globo, Radio Progreso, Radio Uno), y a la televisión (Cholusat sur), así como los correos electrónicos que recibo día a día, que el pueblo hondureño está a una chispa de estallar, y si los usurpadores golpistas insisten en su proyecto de por sí ya fallido, les puede ser profético el poema de Roberto Sosa, Los Pobres: “Pueden/ destruir el aire como aves furiosas,/ nublar el sol”. Y esta no es una metáfora poética sino una realidad que está a punto de ocurrir en Honduras.Sin duda, para salir de todo este caos, no queda sino el regreso de Mel, la única alternativa (le digo “Mel” porque así lo llama su pueblo que lo ama y hablo en nombre de ese pueblo). Solamente la restitución del presidente constitucional puede evitar que Honduras desemboque en un abismo más grande del que ya tenemos desde el fatídico y repudiado día del golpe de Estado-Militar. Y puede regresar cualquier día de estos y por cualquier vía, si los golpistas osan tocarlo, como pueblo y amparados en el artículo tres de nuestra Constitución, tenemos que hacer lo que haya que hacer y que no nos importe nada… al final resurgiremos, como el Ave Fénix, de entre las cenizas

Editorial tomado de Diario tiempo